Últimas películas y recomendaciones XXX

Las películas de esta quincena incluyen un clásico de Sophia Loren, «Dos mujeres», la historia de un boxeador en «Southpaw», la francesa «Amelie», la gran sorpresa turca «Mustang» y el documental «Un país invisible».

Southpaw: Jake Gyllenhaal es otro de mis actores favoritos y veo todas sus películas. Apenas supe que iba a hacer un rol de boxeador me anoté para verla porque el trailer dejaba claro además que era un dramón de aquellos.

Es la historia de Billy Hope, campeón de peso mediano y con una familia feliz. No es un hombre muy inteligente y todas las decisiones las deja en manos de la esposa (Rachel Mc Adams) hasta que de un día para otro su vida da un vuelco por un accidente muy estúpido en una cena de gala. Billy lo pierde todo -incluso la tuición de su hija- y debe partir de cero con todo en contra. Quizás la película es un poco (muy) predecible y recuerda bastante a Rocky con eso del entrenador sabio, el boxeador caído que debe volver a entrenar y recuperar su centro, la gran pelea final.

¿Pero saben qué? No me importa, odio la violencia en vivo pero gozo con las películas de boxeo porque he ido aprendiendo que no es sólo pegar, hay que tener estrategia para subirse al ring y también una enorme fuerza mental para superarte si vas perdiendo. Atacar y defenderse, alternar ambos y conocer el punto débil del adversario, esas son las claves.

Dice el rumor que Jake Gyllenhaal podría ser nominado a los premios Oscar como Mejor Actor por esta película y yo estoy 100% de acuerdo con esa idea, desde “Nightcrawler” que se lo merece. Voy a empezar mi campaña “Por un Oscar para Jake” aunque no tenga idea aún de quiénes serán los otros cuatro contendores.

¿Dónde la vi? En Cinehoyts La Reina.

 

Un país invisible: Mi idea era ver otra cosa, pero justo el día en que fui a comprar mi entrada habían cambiado la programación por este documental que cuenta la historia de Teleanálisis en plena dictadura.

Lo tomé como una señal, a veces las oportunidades para aprender algo nuevo se presentan en bandeja y yo no me voy a negar. No sabía mucho del programa y lo que más recordaba era el trabajo de camarógrafo de Martín Herrera en la serie “Los 80”, pero después de ver “Un país invisible” quedé con una idea súper clara.

Teleanálisis nació en 1984 con la idea de crear un noticiero alternativo que contara a los chilenos y al mundo que era lo que pasaba realmente en Chile considerando que los canales de la época –el 7, el 11 y el 13- o estaban tomados o tenían en su directorio a simpatizantes del régimen encargados de ocultar la realidad y presentar versiones edulcoradas de cada evento. La idea era grabar este material en VHS y distribuirlo entre los suscriptores muy disimuladamente, mano en mano o a través de amigos y familiares.

Qué valientes eran, tomar la cámara y salir a grabar protestas y desmanes sabiendo que si se los llevaban detenidos probablemente no volvieran. Muy real todo, porque todos los periodistas cuentan que se morían de miedo, pero había que hacerlo, que no se podían quedar callados. Incluso uno recuerda que durante el día no tenían tanto temor porque había mucho por hacer, ir de acá para allá, apurarse por llegar a tiempo, la adrenalina a mil. Lo peor venía en las noches con el toque de queda, cuando se enfrentaban con la posibilidad de que llegaran a buscarlos. Cómo será vivir todas las noches con un miedo real y tangible, no puedo imaginarlo.

Hay mucha gente conocida en el documental, entre ellos Augusto Góngora, Pamela Jiles y Cristian Galaz. Es muy recomendable como material histórico y especial para estas fechas además.

¿Dónde la vi? En el cine Radicales de calle Monjitas.

 

“Dos mujeres”: Nunca antes había visto una película de Sophia Loren en sus años de gloria y la verdad es que dejaba sin palabras, era Estupenda, así con mayúscula. Y eso que en esta película la afean un poco porque la historia se trata de una mamá y su hija de 12 años que tienen que huir de Roma debido a los bombardeos de los aliados durante la Segunda Guerra Mundial.

Cesira y Rosetta se van al pueblo donde nació la primera, ubicado en las montañas y ajeno a la guerra, aunque con el tiempo se van dando cuenta de que la maldad llega también allí.

Sophia Loren ganó el Oscar a la Mejor Actriz por esta película y se lo merece completamente. Es una madre de esas incondicionales, pero tampoco deja que la pasen a llevar y levanta la voz y mueve las manos como típica italiana cuando algo le molesta. El clímax de la película para los pelos por su crudeza y aunque las escenas no son para nada explícitas, igual me dejaron tiritona.

¿Dónde la vi? Descargada de internet

 

Amelie: Amelie es una película que siento que vi hace decenios cuando recién se estrenó y de la que no recordaba nada, pero nada. Yo no sé si fue mi cerebro el que bloqueó la historia porque hubo un tiempo en que se puso demasiado de moda o en realidad no me había gustado desde un comienzo.

Para salir de las dudas, mi amiga Paula me prestó su copia en DVD y fue como descubrir algo por primera vez. Efectivamente tengo Alzheimer porque ni siquiera mientras avanzaba tenía idea de lo que vendría después y fue una sorpresa agradable, me entretuve más de lo que pensé.

Amelie es la historia de una niña que crece y se transforma en una joven silenciosa e introvertida. Por una casualidad de la vida encuentra una caja oculta en la casa que arrienda y eso la impulsa a buscar a su antiguo dueño y darse cuenta del poder que tenemos todos para hacer felices al resto con pequeñas cosas que a nosotros nos pueden resultar simples o intentendibles, pero para los otros significan el mundo.

Igual a ratos dan ganas de pegarle un coscorrón a Amelie para que se espabile y deje de esconderse, que asuma las cosas y sea feliz.

Es una película bien turística además, las cosas que muestra de París son hermosas.

 

Mustang: Esta película fue una sorpresa, estaba dentro de la programación del Festival SANFIC y en un principio quería ver otra ese mismo día, pero por temas de horarios y creo que del destino, terminé yendo al Hoyts de La Reina y pucha que lo agradezco, fue la mejor decisión.

“Mustang” se ambienta en un pueblo de Turquía -a 1.000 kilómetros de Estambul-  y nos cuenta la historia de 5 hermanas con edades entre los 12 y los 16 años. Tienen una vida normal hasta que un día las sorprenden jugando en la playa con unos compañeros de colegio y todo cambia: el papá y la mamá deciden que ya basta de influencia occidental y contacto con hombres hasta que se casen, así que las sacan del colegio y las encierran en la casa para enseñarles a cocinar, vestirse recatadamente y ser buenas esposas a futuro.

Y en realidad ese futuro es algo bien cercano porque a los pocos meses consiguen maridos para las dos hermanas mayores y aunque una está conforme, la otra sufre porque no conoce para nada a su esposo y son los papás de ambos quienes concertaron todo el asunto. Cuesta creer que aún en estos tiempos los adultos exijan ver la sábana en la noche de bodas para saber si la novia era virgen, pero ocurre así, tal cual.

Nos quedamos con las tres hermanas restantes y a medida que la película avanza las conocemos más y nos enteramos de qué hace cada una para aceptar lo impuesto o buscar maneras de rebelarse. La voz en off es desde un comienzo la de la hermana menor y creo que esta niña es mi nueva heroína, todo lo que hace es para aplaudirla.

Me encantan las películas donde puedo conocer costumbres de otras partes del mundo y ver “Mustang” es como repasar una versión de “Mujercitas” en Turquía. Mil veces recomendable, mucho girl power además.

Si sigo contando películas este post será eterno y no es la idea, pero hago una mención especial a otras cosas que vi esta quincena: “Pitch Perfect 2” (genial segunda parte), el drama inglés «The falling», los documentales «Allende, mi abuelo Allende» y «Yorgos», la película mexicana «Scherzo diabólico» y «Los 33» (morí de risa con cada escena donde sale Piñera).